Entrevistador: Iván Prado Sejas
Fuente:http://cffbolivia.blogspot.com/2013/09/conversando-con-dennis-morales-escritor.html
Dennis
Morales Iriarte nos sorprende nuevamente con su segunda obra NOVA,
editada por Kipus. Una excelente novela de ciencia ficción dura para un
público lector exigente. Después de haber publicado “Venus Reluciente”,
Dennis se lanza, con NOVA hacia nuevos universos, donde explora el
conflicto entre civilizaciones de replicantes y civilizaciones de
humanoides. La historia de "Nova" repercute en el corazón de un ser
humano, quien duda de sus principios al haber encontrado un ser que
moviliza sus afectos.
Dennis Morales, nuevamente muestra su gran
capacidad imaginativa, y para saber sobre su obra le hicimos la
siguiente entrevista:
Iván Prado Sejas.- ¿Háblanos de los antecedentes que te llevaron a escribir NOVA?
Dennis Morales.-
Como biólogo de profesión tuve abundante información técnica en cuanto a
las maravillas que los organismos poseen en formas y funciones, y me
resulta muy grato extrapolar todo eso a mundos fantásticos, donde no hay
límites trazados para la imaginación. Toda la inspiración se venía
acumulando como un maelstrom, y qué forma más grata que plasmar una
historia como NOVA con la ayuda de una mujer de gran imaginación como
era la co-autora Inês Marques da Silva para lograrlo.
IPS- ¿NOVA, parece producir en ti una suerte de sentimientos inimaginables? ¿Esto, por qué?
DMI.-
Esta historia fue escrita con una colaboración invaluable cuando era un
inmigrante solitario en un país como EE.UU., donde todo era diferente a
Bolivia, y por suerte me fue bien, porque todo lo nuevo a mis ojos se
convertía en otra fuente de inspiración, tanto en el asombro que quise
plasmar a los protagonistas, o a los lugares insospechados que visitaban
en toda la galaxia. Como un foráneo yo mismo, me sentía identificado
con el protagonista que cree enfrentar todo el universo con una mano por
delante y la otra por detrás.
IPS.- El argumento de
tu novela nos traslada hacia un futuro muy lejano, sin embargo, por el
adelanto tecnológico que se tiene hoy en día, ¿será que este futuro no
está más cerca?
DMI.- Las cosas que se descubren en la
ciencia cada semana nos dejan pasmados. Uno creería que ya no queda
dónde más ir al respecto, y como siempre ha ocurrido en el curso de la
historia, uno termina estando equivocado. La globalización es el
verdadero principio de este futuro pronosticado, y sin embargo, la gente
aún vive aislada en recónditos lugares creyendo que no les puede pasar
nada, pero sí, y eso es la tecnología que avanza y les llega de forma
indirecta. ¿Acaso la historia no se repite a sí misma de vez en cuando?
Por ejemplo, el tema de la esclavitud. Ha ocurrido incontables veces en
todas las eras, y ahora que estamos "civilizados" nos resulta impensable
u ofensivo, pero qué si bajaran los estándares de pronto, cuando se da
una oportunidad o una necesidad, como en otros momentos históricos. Eso
es un tema delicado, que queremos que se mantenga lejos en el tiempo. O
en el espacio.
IPS.- Sin entrar en mucho detalle, y
para no quitarle al lector la posibilidad de que haga descubrimientos,
¿qué es lo que más resaltarías de tu obra?
DMI.-
A pesar de ser una historia de ciencia ficción ambientada en tiempos
remotísimos, culturas imposibles, tecnología impensable, etc., el núcleo
mismo sobre el que gravitan todos los acontecimientos es el amor. Como
suena, NOVA acaba siendo una historia de amor imposible, del
descubrimiento de las propias limitaciones, de la superación personal, y
claro, de la lucha que todo eso conlleva para ser alcanzado.
IPS.- ¿Te apoyas en alguna investigación científica para conjeturar la existencia de civilizaciones de replicantes?
DMI.- Han
existido numerosos ejemplos de replicación en la fauna terrestre, que
se dan de forma espontánea, por ejemplo la partenogénesis de abejas y
pulgones y ciertas lagartijas, como una auto-clonación; y la mayoría de
las veces en ambientes controlados, en otros organismos inferiores,
hasta llegar a la famosa oveja Dolly. El fenómeno que he usado como base
en la novela es el mimetismo extremo, que es una imitación de formas o
de comportamientos, y que se aprovecha para imitar al ser humano en toda
su complejidad, y en efecto, conseguir replicantes para todo uso y
gusto.
IPS.- Entrando a la trama de la novela, donde
aparecen conflictos entre replicantes y personas, ¿cómo en este
ambiente puede surgir una atracción afectiva en dos seres diametralmente
opuestos o diferentes?
DMI.- El amor es
ciego, dicen, no discrimina en credos, colores, culturas o países. Por
qué no también razas. Imagínense a Eros, del panteón de dioses romanos,
enamorándose de Psique, una humana nada menos, cuando entre ellos
existía una diferencia abismal. Cuando las condiciones son las
apropiadas uno se enamora en la más disparatadas de las circunstancias, y
quizás llegue un momento en el que alguien encuentre a esa persona
especial aún si proviene de otro planeta, ¡aún si no es humano pero
imita a la perfección a uno! El aspecto moral lo aplica el lector mismo.
IPS.-
¿En qué medida el hecho de que seas Biólogo y Músico, al mismo tiempo,
influye en tu visión distópica o utópica de la vida?
DMI.-
Como biólogo, estoy al tanto de todos los esquemas que se dan a mi
alrededor, en una gama amplia de factores y condiciones, para el hombre,
el medio ambiente, los animales, el planeta en general; y muchas veces
es una visión que resulta desalentadora por cuantos problemas se dan en
todas partes. Ahora, como novel estudiante de música, aprecio el
positivismo de la aventura musical, de cada cosa nueva que aprendo, de
los maestros inmortales que se reflejan en todo lo bueno del
conocimiento humano, del mensaje que termina en un nivel emocional grato
dejándonos con ganas de mejorar. Ambas situaciones resultan en un reto
para proseguir sin escatimar energías para progresar, para alcanzar el
bien, de una u otra forma. El futuro puede verse lóbrego, pero estamos
aquí para encontrar soluciones, mientras que hacemos el camino más
entretenido.
IPS.- ¿Cómo está hoy en día, según tu
apreciación, la narrativa fantástica boliviana? ¿Por qué el lector debe
leer la producción de ciencia ficción de escritores bolivianos?
DMI.-
Los escritores nos hemos dado cuenta que ha habido una diversificación
reciente, bueno, en las últimas décadas, y han aparecido exponentes muy
impresionantes en esta rama literaria. De pronto los lectores tienen
material en abundancia para poder elegir, sin temor en explorar mundos e
historias fantásticas, escapando quizás de lo tradicional que antes era
como una norma, pues no había otras cosas en el mercado. Es un nuevo
Boom y estamos conscientes de ello, las casas editoriales lo saben, y
ahora los lectores están más contentos por cuantos nuevos caminos se
exploran. Por eso mismo, la ciencia ficción en especial, me atrevo a
decir, nunca va a dejar de sorprender a propios y extraños sedientos de
aventuras. Es un cambio de paradigmas, que es apreciado por los
lectores, ya que nosotros escribimos para ellos, no para nosotros
mismos.
IPS.- Acabamos de conocer que el Premio de
Literatura Marcelo Quiroga Santa Cruz, versión 2013, fue otorgada a una
novela de ciencia ficción “El Hombre”, de Álvaro Pérez Q. Asimismo, el
2011 fue premiada otra novela de ciencia ficción, “Hyperrealidad”, de
Ronald Rodrìguez, y en 1998 fue premiada la novela corta “Inka
Kutimunña”, que tiene elementos de narrativa fantástica quechua. ¿Cómo
esto repercute en el desarrollo de la literatura fantástica boliviana y
latinoamericana?
DMI.- Esto es el precedente del
cambio que he mencionado antes. Lento por constante, acorde a las
tendencias generalizadas en muchos países, mostrándonos lo que la
crítica tiene que decir en Bolivia. Ha habido espacio para todo, y ahora
se abre con fuerza una nueva corriente que es reconocida, galardonada y
muy apreciada, pero que a la vez es discriminada por los
tradicionalistas. Es cierto que muchos literatos enfrascados en una
escuela u otra no ofrecen mucho apoyo a los cultores de nuevas
tendencias, y sin embargo los resultados nos muestran que los tiempos
cambian, y que siempre habrá esa necesidad para explorar lo diferente.
IPS.-
Sé que haces parte de SUPERNOVA, sociedad de escritores de narrativa
fantástica y ciencia ficción, ¿cuál es tu rol en esta organización?
DMI.-
Tengo la grandísima suerte de dedicarme al análisis y crítica literaria
de las obras de otros miembros o de terceros. Yo mismo no soy un
literato, pero es una tarea fascinante y a la vez difícil, que encaro
con diligencia haciendo uso de mis limitadas herramientas, que me
permiten crecer como persona, autor, y ayudante. Por supuesto que he
leído mucho, como 400 libros, no como un pasatiempo mecánico, sino por
un interés analítico y por la avidez de superación, y lo que he
aprendido me permite hacer juicios valorativos pertinentes cuando un
colega me otorga el privilegio de leer una de sus obras. Con todo esto,
uno aprende más para poder ayudar más.